¿En qué momento del parto el personal sanitario decide usar instrumentos de ayuda?
En algunas ocasiones se hace imprescindible la finalización del parto cuando por ejemplo el estado del bebé no permite esperar más tiempo para el nacimiento o la posición del bebé en el canal del parto no es la adecuada. En estos casos el equipo valora la posibilidad de realizar un parto instrumental.
¿Qué es un parto instrumental?
Un parto vaginal instrumental se basa en la aplicación de un instrumento (fórceps, espátulas o ventosa) sobre la cabeza del bebé para poder extraerlo aplicando una tracción o ampliando el espacio del canal del parto para que la salida del bebé se produzca.
Como cualquier acción que se realice durante el periodo expulsivo se deberá comunicar previamente a la madre y además deberá tener una indicación clara y cumplir una serie de requisitos. En el caso de parto instrumental uno de los requisitos clave es que la cabeza del bebé se encuentre encajada.
¿Qué instrumentos existen?:
1- Fórceps:
El fórceps es un instrumento formado por dos ramas con apariencia de “palas” que se colocan a ambos lados de la cabeza del bebé. Estas dos ramas se articulan entre sí y a continuación permite que se realiza una tracción aprovechando una contracción mientras se realiza un pujo materno.
Sobre todo, la acción principal del fórceps será poder ayudar al bebé a que rote la cabeza si precisa y además poder ayudarle a descender por el canal vaginal.
Sobre todo, la acción principal del fórceps será poder ayudar al bebé a que rote la cabeza si precisa y además poder ayudarle a descender por el canal vaginal.
Un fórceps se utiliza sobre todo cuando se presente alguna patología materna como alteraciones cardiológicas significativas o cerebrovasculares entre otras. También se puede utilizar cuando se considera que un periodo expulsivo superior a lo normal, no es posible la realización de pujos y también cuando se presenta patología fetal como el riesgo de pérdida de bienestar fetal.
En cambio, al igual que indicaciones, también tiene contraindicaciones.
En cambio, al igual que indicaciones, también tiene contraindicaciones.
¿Cuándo no debemos utilizar el Fórceps?
Un fórceps no deberá utilizarse con un bebé que tenga menos de 34 semanas de gestación y
tampoco en aquellos bebés que no se encuentren encajados en la pelvis de la madre.
Aunque las complicaciones no son frecuentes. Podrían aparecer una serie de alteraciones como traumatismos en la cabecita del bebé o las parálisis faciales transitorias. También en la madre pueden existir complicaciones, sobre todo la aparición de desgarros vaginales, la ampliación de una episiotomía si se hubiese realizado o incluso aunque en menor medida rotura uterina.
tampoco en aquellos bebés que no se encuentren encajados en la pelvis de la madre.
Aunque las complicaciones no son frecuentes. Podrían aparecer una serie de alteraciones como traumatismos en la cabecita del bebé o las parálisis faciales transitorias. También en la madre pueden existir complicaciones, sobre todo la aparición de desgarros vaginales, la ampliación de una episiotomía si se hubiese realizado o incluso aunque en menor medida rotura uterina.
Por tanto, la aplicación del fórceps, si el profesional conoce el instrumento, sus ventajas e inconvenientes, así como sus limitaciones y la técnica de aplicación, serán óptimos y podrán ser de ayuda cuando sea necesario
2-Ventosas o Kiwi:
Por otro lado, un parto instrumental también puede ser aquel en el que se aplica una ventosa. Una ventosa es un instrumento formado por una campana o pequeña copa que se coloca y se fija sobre la cabeza del bebé mediante la realización de una presión negativa. Aunque pueden ser de metal y reutilizables, se encuentran en desuso.
En la actualidad se emplean de forma mayoritaria ventosas desechables de un tamaño inferior llamadas ventosas kiwi.
A diferencia del fórceps, la ventosa permitirá ayudar al bebé en su descenso por el canal vaginal pero no a la rotación de la cabeza, por ello, las circunstancias de la aplicación de la aplicación de la ventosa son similares a las del fórceps exceptuando si fuese necesario la rotación de la cabeza del bebé.
A diferencia del fórceps, la ventosa permitirá ayudar al bebé en su descenso por el canal vaginal pero no a la rotación de la cabeza, por ello, las circunstancias de la aplicación de la aplicación de la ventosa son similares a las del fórceps exceptuando si fuese necesario la rotación de la cabeza del bebé.
¿Cuándo no debemos utilizar la Ventosa?
Como contraindicaciones así mismo, no se deberá realizar la aplicación de la ventosa en los bebés menores de 34 semanas de gestación y en aquellos que se precise rotación de la cabeza.
Como complicaciones que puedan aparecer, sobre todo, pueden ser en la madre los desgarros vaginales y perineales y en el bebé la aparición de lesiones en el cuero cabelludo o algún traumatismo transitorio.
3- Espátulas de Thierry:
Y ya como último instrumento nos encontramos las espátulas de Thierry. Es un instrumento que consta de dos palancas de primer género, que usan como punto de apoyo la pared de la pelvis que estará en contacto con la cara externa del instrumento.
El objetivo de las espátulas es ampliar el canal del parto y por ello no se aplican en el bebé si no en el canal vaginal de la madre.
El objetivo de las espátulas es ampliar el canal del parto y por ello no se aplican en el bebé si no en el canal vaginal de la madre.
Su indicación es muy similar a la del fórceps y sobre todo en el caso de bebés prematuros o con alguna alteración craneal.
¿Cuando no debemos utilizar las Espátulas de Thierry?
Como contraindicaciones serían similares a las descritas en el fórceps, pero, además, cuando se prevé una gran rotación o cuando se necesite aplicar fuerza para la extracción.
Entre las complicaciones más frecuentes consisten en desgarros vaginal y perineales, ya que las espátulas actúan dilatando los tejidos para facilitar el expulsivo. Sobre todo, para el bebé, pueden aparecer lesiones cutáneas y algún traumatismo.
Se puede considerar que las espátulas son mínimamente lesivas, ya que no actúan mediante un mecanismo de prensión sino de pulsión.
Se puede considerar que las espátulas son mínimamente lesivas, ya que no actúan mediante un mecanismo de prensión sino de pulsión.
En resumen:
Decir que tanto el fórceps como la ventosa o las espátulas siguen siendo instrumentos de gran utilidad cuando se precisan. Es importante conocer el instrumento, las indicaciones y prevenir las complicaciones si se precisa.
Además, será importante que si se ha realizado una aplicación de estos instrumentos se deberá realiza una valoración de suelo pélvico posterior para detectar de forma temprana cualquier tipo de complicación que haya podido suceder y además comenzar de forma temprana la recuperación si ha tenido lugar algún desgarro vaginal o perineal, la episiotomía y también de toda la musculatura del suelo pélvico y abdominal.
Erica Rodrigues
Matrona de Baby Suite