Las noches de despertares infinitos, desvelos y paseos por la casa a altas horas de la madrugada, son una preocupación real para muchas familias. No saber si nuestro hijo duerme “bien” o si la situación que estamos pasando es de esperar para su edad, ocasiona mucha ansiedad y estrés para padres y madres que sienten que no pueden aguantar un solo día más sin descansar, teniendo que atender al día siguiente las obligaciones habituales en el trabajo, en la casa y en el cuidado de nuestros hijos.
¿Qué podemos esperar del sueño durante el primer año?:
Es importante tener claro, como siempre se dice, que el sueño es evolutivo, y que los ciclos de sueño irán siendo más largos a medida que los bebés y niños van siendo más mayores, hasta alcanzar la duración que tenemos en nuestra vida adulta, por tanto, en lo que podremos ir trabajando poco a poco, será en conseguir que nuestro hijo enlace con facilidad la mayor cantidad de ciclos posibles sin llegar a despertarse por completo.
Sobre los 3-4 meses:
Aproximadamente los 3-4 meses empezarán a tener una percepción más clara del día y la noche, y será en este momento cuando podremos empezar a realizar las primeras intervenciones para ir mejorando el sueño de toda la familia.
- Intenta tener una rutina clara de día y de noche, reserva actividades concretas para ambos momentos e intenta no salir del dormitorio en las horas nocturnas.
- Sigue priorizando el sueño y la alimentación a demanda, pero empieza a trabajar una estructura básica de horarios, intenta empezar y acabar el día a la misma hora y poco a poco irás viendo cómo los momentos de siesta se van repitiendo.
Es en este momento donde viviremos la primera crisis importante, momento en el cual el cerebro del niño adquiere 2 fases más de sueño, llegando a tener las 4 que tendremos toda la vida, y esto revelará la verdad de su capacidad para enlazar ciclos de sueño. Es por eso que tantos niños duermen “bien” hasta este momento.
Entre los 6-9 meses:
A partir de los 6 meses podremos empezar a trabajar los horarios de una forma más clara,
y abordar posibles hábitos externos de conciliación que puedan estar dificultando que enlace ciclos de sueño. En esta etapa, necesitarán 3 siestas al día, estarán durmiendo aproximadamente cada 3 horas de vigilia.
- Trabaja a fondo en los horarios en este momento para que el inicio y fin del día, y las siestas, ocurran siempre en los mismos momentos.
- Identifica que posibles situaciones reclama cada vez que se despierta, y ve incorporando
otros hábitos alternativos con el fin de que no se quede anclado a una sola fórmula a la hora de dormir y cuando se despierta, y poco a poco así, que vaya enlazando los ciclos cada vez de forma más autónoma. - En las noches, necesitarán comer entre 0 y 2 veces, planifica los momentos en los que le ofrecerás alimento.
Entre los 9-12 meses:
- Trabaja en las dos siestas que necesita, que deberán sumar aproximadamente 3 horas
de sueño diurno. - Las necesidades de alimentación en esta etapa serán entre 0 y 1 tomas, raramente 2, puedes ir reduciendo las tomas de pecho y los ml de biberón.
¿Cómo puedes aplicar todas estas pautas y crear tu plan de sueño personalizado?
En Baby Suite impartimos un Taller sobre Sueño Infantil (os dejo toda la info pinchando aquí), que gusta muchísimo y los papás que lo realizan aseguran que ha supuesto un antes y un después en sus vidas, así como en el sueño y descanso de su bebé.
Abordaremos todas estas circunstancias de manera práctica y aportando soluciones que podréis aplicar con vuestros hijos entre los 6 meses y los 2,5 años.
Ademas en este link a nuestra web, podéis también leer mucha información de valor sobre el sueño del bebé.
Gracias Sara por compartir tu sabiduría con las lectoras del Blog.
Sara Traver
Sleep Coach de Baby Suite